El coronavirus ha venido para quedarse, la vacuna tardará en
llegar y, mientras eso no pase, habrá restricciones en mayor o menor grado a
las grandes aglomeraciones de personas. El comercio electrónico ha dejado
de ser una opción, para convertirse en una obligación, que permite
mantener no sólo las ventas, sino la relación con el cliente y su consecuente
fidelización.
Cada día son más las personas que han tomado conciencia de
las medidas de aislamiento social recomendadas por los expertos para evitar la
propagación y la cantidad de contagios por coronavirus. Sin embargo, quedarse
en casa es difícil cuando es necesario abastecerse de productos de primera
necesidad y es allí cuando los Delivery o entregas a domicilio cobran
importancia.
En estas últimas semanas ha cambiado, y mucho, la modalidad
compras. Lo que más ha crecido son los productos que las personas
consideran indispensables: prevención epidémica, de limpieza del hogar y
principalmente alimentos. Y es, precisamente, por las circunstancias
especiales de la propia cuarentena, en las que el mundo se ha vuelto mucho más
digital, también las compras se han vuelto digitales. Todo con tal de
no salir a la calle y evitar el riesgo de contagio.
En cuanto a los clientes, es importante tener en cuenta que
un 10% de las personas que han comprado en estas semanas a través de internet,
lo hacían por primera vez: grupos de población que se han visto obligados a
utilizar estos canales y que, probablemente, seguirán usándolos cuando termine
la etapa de cuarentena.
Eso, precisamente, es lo que está permitiendo a muchos
negocios incrementar considerablemente sus ventas o, al menos, reducir
notablemente sus pérdidas, según los casos.
Particularmente en alimentos, los productos pueden llegar a
experimentar una expansión sostenida, ya que los hogares pueden consumir más en
casa de lo que normalmente lo harían.
Si bien el Delivery es una modalidad que existe hace muchos años, hoy ha cobrado una relevancia importante, ya que se trata de un servicio que es altamente requerido debido al distanciamiento social.
Muchos negocios tuvieron que cerrar momentáneamente,
mientras que otros decidieron adaptarse rápidamente y aprovechar la
oportunidad. Y hoy podemos encontrar también una interesante oferta de Delivery
de Panes.
El pan recién horneado es muy apreciado por el
consumidor y no puede faltar en la mesa.
Ésta ha sido una de las razones que motiva a tantas personas
a intentar hacer su propio pan y crear una moda que parece ser una oportunidad.
Despertar el valor del pan fresco y saludable en los clientes, introducir otras
variedades de panes o nutricionalmente más ricos, que eran consumidos por otros
nichos de mercado y “educar” al cliente para otros sabores a precios
atractivos, parece ser un nuevo camino.
Los cambios que nos dejará esta crisis todavía están por
definir, lo que está claro es que algunas de las costumbres adquiridas durante
la cuarentena permanecerán, ofreciendo nuevas y mejores posibilidades de
negocio. Y es así como cada día aparecen más panaderías con venta on line
y servicio de Delivery. Pero es muy importante también, optimizar la gestión de
la panadería.
Algunos puntos para considerar serían:
Adaptar horario de apertura Asegurarse de que el negocio esté abierto, limpio y abastecido puede ser una tarea exigente en estos días. Para mantenerlo en funcionamiento, considerar reorganizar horarios de apertura y cierre para tener tiempo suficiente para dar seguimiento a las medidas de higiene, reabastecer y mantener saludables a los miembros de su equipo.
Analizar la oferta de productos
Observar detenidamente la variedad de panes, teniendo en cuenta los correctos procesos en la producción. Cómo ha cambiado el comportamiento de compra de los clientes desde el comienzo del brote. Poner el foco en panes saludables, sin aditivos, que puedan conservarse mejor.
Algunas recomendaciones:
Diseñar y llevar a cabo la plataforma online. Si no se tiene página web, es el momento para pensar en ella, con integración de ventas online.
Administrar tu propia tienda con la posibilidad de vender los productos del negocio y cualquier otro que sea complementario sin necesidad de generar stock.
Reorganizar tu negocio de manera segura, confiable y con inversión mínima.
Capacitarse con tecnología. En estos tiempos es fundamental aprovechar el alcance y los beneficios de trabajar a través de plataformas tecnológicas, redes sociales y aplicaciones.
Sandra Jorquera, Miembro Auditor de la Delegación chilena de l’Académie Culinaire de France.